Whatever

-¿Estás bien? -Tú lo sabías, ¿verdad? Por eso insistías tanto...-me tomaron unos segundos para entender a qué se refería e incrédula supe que Frida había sido honesta con Liam respecto a sus sentimientos. -Sí, pero te empeñaste en... -Lo sé... pero vamos, es tu fiesta- sonrió un poco aturdido aún y le di un pequeño abrazo.  Después del shock epistolar y la declaración inédita de mi hermana la noche continuó entre baile, bebidas y muchas risas, volvía a sentirme bien, feliz, contenta por compartir aquella noche, la felicidad que sentía. Jane y James estaban ahí y además de Frida, Liam decidió platicar un poco y tratar de llevar la noche bien, pensé que eso nunca ocurriría, pero lo disfrutaría ya que lo sucedido en las fiestas, suele quedarse ahí para no repetirse más. Bailamos de absolutamente todo y coreamos canciones de Joy Division y the Cure, hacíamos juegos, bromas y maldades. Me senté un momento para observar aquella escena donde Liam tomaba de la mano a Frida y ella to

Los invitados llegaron dadas las siete de la noche y la música se hizo presente. -Madonna- Escuché a mi oído -¡Liam!- lo abracé feliz -Nos vimos ayer -Payaso -Toma... no es gran cosa pero...-sacó una caja pequeñita que abriría después. -Muchas gracias Liam no te hubieras molestado -Es por el cariño que te tengo. Por cierto... alguien te envió algo- mi corazón se detuvo, él sacó un sobre y temblorosa lo tomé.-se acuerda de ti aún, no creas que no. -Entiendo... gracias Liam -Deberías leerla, no pierdes nada.- Mucha gente estaba en el patio y corrí a la sala para abrir precipitadamente la carta, temblaba y sentía un nudo en la boca del estómago. “Pequeña Sofí... en estos momentos no encuentro qué frases usar o qué palabras escribir para alentarte en la nueva etapa que te llevará a descubrir muchas cosas que seguramente terminarán de forjar esa compleja pero brillante personalidad. Sé que he estado lejos e incomunicado, pero ya sabes... la banda. Quizá vuelva p

Para el atardecer me di una ducha y esperaba a que mi cabello se secara, Jane iría de nueva cuenta para ayudarme con todo el proceso de maquillaje y peinado para el baile. Frida estaba conmigo, muy entusiasmada, también sacaba fotos con su polaroid, puso a los Stone Roses y me apresuré a quitarlos, era música de Noel. -Quiero escuchar algo más mío- dije sonriente y pronto sonó “Panic” de los Smiths y Frida cantó junto conmigo mientras acomodábamos el vestido. Pronto llegó Jane, subió y al verme con el vestido gritó, hasta Frida comenzó a reír y me sorprendió que ésta se quedara ahí e incluso ayudara a Jane con todo. Jalones, pasadores, sombras, rímel, labial... una hora y media en todo eso para quedar “divina” según Jane que me miraba idílica. Ella y Frida se sentaron en la cama. -Estás preciosa, disfruta de tu noche- sonrió Jane dando palmaditas -Eres la vagabunda más hermosa que he visto, hermanita- agregó Frida riéndose -Muchas gracias a las dos- las abracé y pronto son

Y el día llegó. Me levanté tempranísimo, la ceremonia se celebraría a las nueve de la mañana, me levanté a la seis para esperar a que llegara Jane y me ayudara con el peinado y maquillaje, aunque ella ya había amenazado con que dos veces en ese día me ayudaría, pues para el baile también me arreglaría. Planchó mi cabello y lo peinó de manera sencilla, me hizo un maquillaje natural pero que me hiciera ver como persona decente. Me puse el uniforme y bajé para desayunar con ella y Connie, mi familia debía estar antes en la escuela. Jane se fue y se dirigió junto con James a la escuela para alcanzar lugar en las gradas aunque no eran precisamente alumnos de la escuela, pero la institución había decidido dejar las gradas con pase libre para los amigos de los graduados. Connie se veía muy bonita con un vestido vintage que adornaba su regordeta figura, subimos a un auto enviado por mi padre y nos llevaron hasta la escuela, me preguntaba si Liam ya estaba ahí; pasamos por la casa de los

-Ya quiero que llegue el día.- me reí-será genial tenerte ahí, además de mis padres, Connie y mi hermana... ¿por cierto, podemos hablar de ella? -No -¿Por qué? Nosotros hablamos de Noel -Porque tú así lo quisiste. Yo no quiero hablar de Frida y no insistas- De pronto se escuchó a Frida salir de su habitación, corrió escaleras abajo y la detuve... -¿A dónde y tan deprisa?- ella se detuvo y no quería mirar pues había visto a Liam y éste también hacía lo propio para ignorarla. -Saldré- ella miraba su celular -¿Otra vez? ¿A dónde?- esta vez sonó el timbre -Llegaré en la noche -No puedes irte así como así- el timbre seguía sonando -¿Quién demonios?-me levanté y caminé irritada a atender, mi hermana parecía nerviosa y se detuvo justo detrás de mí después de abrir la puerta. -Hola -Ah... tú- contesté cortante a un Anton nervioso. Miré a Frida, frustrada por no poder asesinarla. -Nos vemos después Sofía- caminó cohibida -Hasta luego- se despidió Anton, t

Prefería que no llamara y tener noticias suyas era un acto meramente milagroso, comencé a desesperarme; cuatro meses desde que había escrito su última carta, dos meses antes cuando llamaba con regularidad me enteré de que su ausencia se extendería y no sabía de manera precisa qué día regresaría. Total parcial: seis meses de letras y ausencias.  Liam y Frida para ese entonces se las ingeniaron bastante bien para dejar de hablarse definitivamente, y no es que conmigo fueran malos, de hecho me hacían olvidar (cuando en algunas ocasiones recordaba) que tenía una relación fallida. Si es que aún la tenía. Mi hermana había optado por la amistad y compañía de Anton y Chris, además de ser una buena amiga de James, con quien por cierto, mi relación fue mejorando debido a que descubrí que realmente era muy paciente conmigo, mis desplantes y estupideces; llevábamos una relación cordial, ya toleraba sus rarezas y caballerosidades, creo que al fin estaba creciendo.  En cuestión de días h